Según el INDEC, en diciembre, el estimador mensual de la actividad económica se desplomó siete por ciento interanual, en lo que significó una de las caídas más abruptas del año anterior y la novena consecutiva. El rubro más golpeado fue Comercio mayorista, minorista y reparaciones, con un descenso de 15,7 por ciento.

El sector producto tuvo números muy negativos en 2018, principalmente, por las consecuencias generadas a partir de la caída general en el poder adquisitivo, la importante suba del dólar y los tarifazos en los servicios de primera necesidad, como la luz y el gas.

Y, como era de esperarse, el cierre del año, también, fue malo. Porque, según informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), en diciembre, el estimador mensual de la actividad económica se desplomó siete por ciento con respecto al mismo mes de 2017.

La baja fue la segunda más importante del año y la novena consecutiva. En efecto, luego de un crecimiento, en marzo, de 2,2 por ciento, siguieron todas cifras negativas: una disminución de 0,3, en abril; de cinco, en mayo; de -6,5, en junio; de -2,8; en julio; de -1,8, en agosto; de seis, en septiembre; de -4,6, en octubre; de -7,5, en noviembre, y la actual.

En lo que respecta al acumulado del año, hubo un descenso de 2,6 por ciento comparado al mismo acumulado de 2017. Solo se registró una mejora de 0,7 por ciento si se tiene en cuenta noviembre.

La situación, por rubros

En la discriminación por rubros, el que resultó más golpeado, en diciembre, en la comparación interanual, fue Comercio mayorista, minorista y reparaciones, con una baja de 15,7 por ciento; seguido por Industria manufacturera, con -14,2; y Construcción, con -12,7.

El listado continúa con Impuestos netos de subsidios, con una caída de 8,2 por ciento; Electricidad, gas y agua, con -6,8; Pesca, con -4,8; y Transporte y comunicaciones, con -4,1. El mejor número lo registró Agricultura, ganadería, caza y silvicultura, uno de los tres que mejoró, con 4,7 por ciento.