Desde el gremio textil matancero “no esperan soluciones” del Gobierno para salir de la crisis
Confirmaron que no participarán de la convocatoria empresarial para elaborar una agenda, con el fin de elevarla al Ejecutivo Nacional, para tratar de reactivar el consumo interno y la cadena de valor productivo en el sector. “Prometieron que no iba a haber despidos y no cumplieron” disparó Ortiz.
La Federación de Industrias Textiles Argentinas (FITA) convocó a las distintas Entidades Gremiales Empresarias y de Trabajadores del sector para trabajar y elaborar propuestas afines para reactivar la producción en el rubro. El objetivo es el acercar las iniciativas al Gobierno para superar la difícil situación económica ante el proceso inflacionario, la falta de demanda en el mercado interno y la apertura a las importaciones.
En ese contexto, el secretario general del gremio textil de La Matanza, Mario Ortiz, aseguró a El1 Digital que no participará de la iniciativa. Argumenta que, en varias oportunidades, solicitaron a la actual gestión que instrumentara medidas para disminuir los efectos de la caída del consumo interno, el incremento de las importaciones de productos textiles, los altos costos de las tarifas de los servicios públicos y las elevadas cargas impositivas. Y lamentó: “Jamás obtuvimos una respuesta a estos reclamos”.
“En mayo último, cuando se trató en el Congreso Nacional el proyecto de ley de desempleo, el Gobierno se reunió con los representantes más importantes del sector industrial y firmaron un pacto para frenar el aumento del desempleo. Los empresarios se comprometieron a no reducir sus planteles de empleados y, además, a generar inversiones para promover más puestos de trabajo. Sin embargo, los despidos no cesaron”, lamentó el referente textil.
Consultado sobre el panorama de la industria textil en La Matanza, precisó: “Hasta el momento hay unos 2.000 trabajadores suspendidos, cobrando aproximadamente un 70 por ciento del salario básico y eso es muy triste. Si a un operario no le alcanza su sueldo completo, con los aumentos que se produjeron en los últimos meses, la situación de estos afiliados es muy crítica. Parece que quieren implementar un sistema de trabajo como el de los países asiático”.
Fuente: El1 digital
