De a poco, crecen las operaciones de pagos a través del celular
Los consumidores disponen y aprovechan de una opción más para abonar productos y servicios con los smartphones, que varían desde la nafta hasta las tarjetas de crédito. Desde el Banco Central se promueve esta posibilidad para transformar al móvil en una billetera virtual.
Promovida por el Banco Central, que busca generar cada vez más alternativas para pagos móviles y operaciones digitales, la nueva aplicación que funciona actualmente con 15 empresas, lleva al celular convertirse en una “billetera virtual” para realizar abonos con nuevos rubros de comercios y servicios, que día a día se van sumando a esta modalidad.
El sistema es muy práctico y funciona a través del escaneo -con el celular- de un código QR, que aparece, por ejemplo, en el surtidor de una estación de servicios de combustibles. El conductor no debe bajarse del auto para realizar el pago; ya que una vez culminado el escaneado, en el visor del teléfono móvil, aparecerán los litros, el precio y la opción para confirmar la operación.
De la misma manera, este servicio se suma a otros que ya pueden realizarse a través de la telefonía celular. En el mercado local este año fue incorporando a los pagos móviles varios productos y servicios. Por ejemplo, Pago Fácil permite pagar desde el celular con un procedimiento similar al que se utiliza para realizar una recarga de saldo en los teléfonos.
En ese contexto, desde el Banco Central confirmaron que, a partir del 15 de diciembre, se podrá pagar el resumen de la tarjeta de crédito, a través de un lector que entregarán los bancos y que se puede añadir al dispositivo para compras realizadas con tarjeta de débito. Con esta aplicación, los pequeños comercios también podrán recibir pagos que no sean en efectivo.
De acuerdo a la normativa vigente, las entidades bancarias que deseen incorporarse a “la billetera virtual”, deberán desarrollar tres productos: una aplicación móvil que le permita a los usuarios realizar transferencias inmediatas en forma remota; un segundo que contemple la posibilidad de recibir pagos con una tarjeta de débito y, finalmente, en los casos que los comercios lo demanden, un dispositivo que funciona a modo de “posnet”.
Fuente: El1 digital
