La inflación absorbió el préstamo de Capital Semilla 2015 a jóvenes ganadores
La cooperativa Todos de Pie no pueden fabricar un artefacto especialmente diseñado para personas con problemas motrices. El aumento de las tarifas de los servicios públicos, los aumentos de locación y los impuestos consumieron el préstamo de honor recibido y, ahora, producen parrillas de asado.
En la edición 2015 del programa nacional Capital Semilla, la cooperativa Todos de Pie (T.D.P.) se adjudicó un préstamo de honor para la producción y reparación de aparatos ortopédicos. Pero meses después, lamentablemente, la inflación absorbió gran parte del dinero para la adquisición de materias primas y, ahora, fabrica parrillas de asado con el propósito de recuperar parte del capital y comenzar a producir los prototipos mejorados.
En diálogo con El1 Digital, uno de los creadores de este prototipo, Gonzalo Reta, explicó que la inflación, el alto precio del alquiler, los aumentos en las tarifas de los servicios públicos y los impuestos “absorbieron los fondos del préstamo de honor” -por la suma total de 58.000 pesos- y, por lo tanto, no se encuentran en condiciones económicas de fabricar el “novedoso bipdedestador”.
En ese contexto, el joven, desde su taller de Lomas del Mirador, relató: “El proceso inflacionario hizo que el efectivo reservado resultase insuficiente. No pudimos comprar algunas máquinas y las que se adquirieron no se pudieron instalar. Fue imposible comenzar el sueño de la producción en serie. El armado del bipedestador se basa en productos confeccionados en La Matanza, a excepción de las ruedas”.
El invento fue pensado para las personas con discapacidad motriz en sus miembros inferiores para poder desplazarse en forma manual e independiente. “De esta manera, el paciente puede circular por la vía pública o el interior de su casa como si estuviera parado. Pero el bipedestador, además, contribuye a que se reactive la circulación de la sangre en las venas y, así, evitar que se generen enfermedades”, indicó Reta.
En esa misma línea, señaló: “Comenzamos a fabricar parrillas de asado ya que es un producto que se vende bien, es fácil de hacer, el costo es muy bajo y el margen de ganancia es amplio. Usamos los soldadores comprados para elaboración y reparación de aparatos ortopédicos. Es una forma de recuperar el capital suficiente y así poder concretar el sueño de reproducir el prototipo”.
Los interesados en adquirir las parrillas que fabrican los jóvenes inventores de La Matanza, podrán comunicarse por WhatsApp al 15-6182-0690.
Fuente: El1 digital